Fecha: 02/05/2021
Fuente: Gasteizberri
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El programa ‘Lehen Urratsa’, surgido del ‘Fondo Inor Atzean Utzi Gabe del departamento de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales del Gobierno Vasco, ha atendido, desde el fin del confinamiento, a 578 personas. Este programa trata de ofrecer alternativas de alojamiento con apoyo e itinerarios de integración social a las personas que vivían en la calle antes del confinamiento y que se alojaron en los refugios de Bilbao, Vitoria-Gasteiz y Donostia durante el cierre. De las578 personas, 35 son en Álava, 97 en Gipuzkoa y 446 en Bizkaia.

Los refugios instalados en las tres capitales vascas acogieron, durante el confinamiento, tanto a personas que ya vivían en la calle, como a otras que, por efecto del mismo, se habían visto abocadas a la pérdida del alojamiento del que disponían (vivienda en alquiler, habitación, pensión, hotel, etc). El programa ‘Lehen Urratsa’ surgió para ofrecer alternativas que permitieran a estas personas retomar o iniciar itinerarios de integración social, sin verse abocadas a tener que vivir de nuevo en la calle. También, tiene entre sus objetivos, evitar la cronificación del ‘sinhogarismo’.

Las entidades que colaboran con Lehen Urratsa son: Zabalduz Kooperativa Elkartea, Cruz Roja, Peñascal S.Coop, Cáritas Diocesana de Bilbao, Ellacuría Fundazioa, Bizitegi, Arrats y Cáritas Diocesana de Donostia.

Beatriz Artolazabal, consejera de Igualdad del Gobierno Vasco, ha puesto en valor el impacto positivo de los programas impulsados por el Fondo Covid Inor Atzean Utzi Gabe, en las personas sin hogar. Así, ha recordado que el confinamiento permitió identificar una a una, con nombres y apellidos, a las personas que se encontraban en situación de calle, ya que casi todas se encontraban atendidas en los dispositivos de Aterpeak. Además, finalizado el confinamiento, a todas las personas acogidas se les ofreció una alternativa habitacional, a través de Lehen Urratsa, y el acceso a una prestación para cubrir necesidades básicas a través de Azken Sarea Indartzen.

Situación inédita

El 14 de marzo de 2020, con el confinamiento decretado al inicio de la pandemia, el Gobierno de Pedro Sánchez decidió cerrar pensiones y hoteles, dejando en la calle a centenares de personas. «Nos encontramos entonces ante una realidad crítica y que requería una atención de urgencia, que pudo ser organizada gracias a la experiencia y trabajo previo de colaboración que venimos realizando desde el Gobierno Vasco, junto con el resto de Administraciones Públicas y entidades del Tercer Sector Social», ha señalado Artolazabal. La consejera ha estimado que la aportación de las entidades sociales que seguían estando en primera línea, «fue clave» para conocer la realidad que estaba emergiendo y que requería una respuesta. «En Euskadi hemos tenido un eficaz muro de contención contra la desigualdad».

Beatriz Artolazabal ha explicado que, en el marco de la Mesa de Diálogo Civil, la viceconsejería de Políticas Sociales activó la comisión de exclusión con el objetivo de atender y colaborar con dichas entidades en la atención de todos los colectivos que quedaban en calle, sin recursos, en soledad y sin tener aseguradas sus necesidades básicas. Para ello contó con la colaboración de Ayuntamientos, Diputaciones Forales y otros departamentos del Gobierno Vasco, como Vivienda y Salud.

En este punto, la consejera ha destacado «los itinerarios exitosos que en estos meses están realizando decenas de jóvenes sin hogar, de mujeres en dificultades, de personas con enfermedades mentales y adicciones… etcétera». Y ha subrayado la encomiable labor realizada entidades sociales como Bizitegi, Ellakuria, Peñascal, las Comisiones anti Sida (Bizkaisida y Sidalava), Zabalduz, Cáritas, Arrats, Erain, Fundación Gizakia, Agipad, Etorkintza, Fundación Jeiki y decenas de otras entidades sociales contra la exclusión social y el sinhogarismo.