¿Qué os ha llevado a decidir convertiros en una empresa con impacto positivo?
Pelayo tiene en su ADN, desde hace muchos años, el compromiso con los colectivos mas vulnerables y la voluntad de revertir a la sociedad parte de lo que obtenemos de ella. Fruto de este compromiso nació en 2005 la Fundación Pelayo, desde donde se canaliza toda la acción social de Grupo Pelayo.
Además, actualmente, cada vez más los propios empleados y clientes valoran en su relación con la empresa esta forma de gestionar y el compromiso con la aportación a los ODS.
¿De qué manera beneficia al tejido empresarial la adhesión a la iniciativa de la Casilla Empresa Solidaria?
La adhesión a la Casilla Empresa Solidaria demuestra el compromiso empresarial por la sociedad en general y la especial sensibilidad con los colectivos más vulnerables. Esta adhesión beneficia a todos, no genera un coste económico a nivel empresarial y sí un gran diferencial a nivel reputacional y buenas prácticas, dado que da lugar a impulsar alianzas duraderas entre empresas y Tercer Sector.
A través de esta casilla garantizamos que parte de nuestros impuestos se dirijan a la acción social a través de organizaciones profesionales, con experiencia en este tipo de gestión y capaces, por tanto, de obtener los mejores resultados con los fondos disponibles.
¿Qué supone el establecimiento de alianzas entre las empresas y el Tercer Sector de cara a conseguir un mundo mejor? En estos momentos tan complicados, ¿son estas alianzas el motor del cambio social para conseguir una reconstrucción social más justa e impulsar la consecución de los ODS?
Las alianzas entre empresas y Tercer Sector, nos ayudan a cumplir con la estrategia de RSC a las empresas y aportan estabilidad a las ONG. Son relaciones basadas en la confianza y la transparencia que facilitan la implicación de los empleados en las distintas campañas y nos permiten aprovechar la experiencia y profesionalidad de las ONG para abordar proyectos.
Estas alianzas suponen una mayor relación entre ONG-empresa que permite explorar distintas vías de colaboración, no solo la financiación económica de proyectos.
En Pelayo, por ejemplo, en el caso de desastres humanitarios en los que el exceso de información complica muchas veces saber a nivel individual cómo canalizar la ayuda, abrimos campañas en colaboración con ONG con las que tenemos alianzas que suelen ser muy bien acogidas. Recientemente, con el inicio de la pandemia, lanzamos una campaña entre empleados y colaboradores en apoyo al programa Cruz Roja Responde y el resultado fue muy positivo.
Marcar la Casilla Empresa Solidaria es el principio de la colaboración. ¿Cuáles son los siguientes pasos a seguir en el camino hacia las buenas prácticas de las empresas?
Sin duda las empresas tenemos la obligación de ir mucho más allá en nuestro compromiso social, además de sumarnos a la Casilla de Empresa Solidaria. Para contribuir a mejorar nuestra sociedad, debemos ser transparentes con nuestros clientes y empleados, así como ejemplo de buenas prácticas y compromiso con los ODS.
Por otro lado, tenemos la oportunidad de sensibilizar e impulsar en nuestros grupos de interés acciones que promuevan este cambio social tan necesario, poner a disposición de nuestros empleados y clientes la información a la que tenemos acceso a través de nuestras alianzas con el Tercer Sector y facilitar la colaboración en distintas líneas.
En Pelayo nos caracterizamos por estar especialmente comprometidos con las causas sociales, en especial con aquellos colectivos más desfavorecidos, y queremos que nuestros empleados sean parte de este compromiso, por ello tienen un papel muy importante dentro de toda la actividad que se desarrolla desde Fundación.
Fomentamos acciones de voluntariado entre nuestros empleados y celebramos anualmente un concurso para que aquellos que colaboran de manera voluntaria en alguna entidad social puedan presentar una candidatura de proyecto y la Fundación pueda apoyarlo para su desarrollo. Esta iniciativa permite crear una cultura solidaria entre compañeros y fomenta la sensibilización en materia social. Además, incrementa el orgullo de pertenencia de los empleados al ver que su empresa se compromete con las acciones que ellos apoyan.